Dan Woo-hyun yacía en el balcón y contemplaba el paisaje de la mansión.
La vista de Dan Somi corriendo por el patio, el sonido de vítores desde un lado. Jang Sam-tae y Ma Jang-kang discuten, esos dos viejos beben.
El escenario de esta mansión.
Una imagen que nunca había imaginado hasta ahora.
Dan Woo-hyun cerró los ojos y sonrió.
Sin embargo, su sonrisa desapareció antes de que se diera cuenta.
'El Demonio de Sangre...'
Se sabía que este tipo tenía sed de sangre.
Esa fuerza, esa energía y ese tono de voz también. Era alguien que nunca podría ser olvidado. Ahora que las cosas habían empezado a moverse, Dan Woo-hyun no podía quedarse quieto.
Entonces, primero, trató de hacerse con el Sindicato de Comerciantes del Anillo Dorado.
No importa cuál sea la pelea, pelear cuesta dinero. Además, debe haber una persona llamada Man Hu-ryang en algún lugar con el Demonio de Sangre, por lo que la persona más necesaria era la que acabaría con su sindicato de comerciantes.
Y las cosas empezaron a moverse.
Ahora.
El tiempo, que hasta entonces había avanzado lentamente, se estaba acelerando rápidamente.
Dan Woo-hyun fue el único que sintió eso.
'¿Dónde está?' pensó para sí mismo y siguió el lugar. La forma más rápida de acabar con esto era destruir la base.
Matar al Demonio de Sangre sería lo mejor.
Pero a diferencia del pasado, cuando el Culto del Demonio de Sangre estuvo expuesto al público, ahora estaba escondido y operaba silenciosamente, por lo que incluso si uno quisiera buscarlo, no podría encontrarlo.
Por eso intentaban atrapar a Man Hu-ryang primero.
Él también ya estaba desaparecido.
Pero era natural que sus fondos fluyeran hacia el Demonio de Sangre. Y si uno buscaba algo más, entonces encontraban otra cosa.
'El Demonio Divino del Viento Negro'.
También necesitaban atraparlo.
Se dijo que la persona que una vez luchó con Chun Mujin durante tres días y tres noches finalmente logró matar al Demonio Divino del Viento Negro. Dado que este era el tipo que originalmente fundó el Culto Demoníaco, el lugar al que iría era...
“¿Por qué estás tan preocupado?”
Dan Woo-hyun respondió sin mirar.
"No hay nada de que preocuparse. Sólo hay un par de cosas que me molestan, eso es todo. ¿Por qué no regresar al Culto Demoníaco?
Dijo Dan Woo-hyun y miró a Sa Dohak.
Lo siguiente que supo fue que Sa Dohak se sentó a su lado y se encogió de hombros. Quería volver, pero como allí no ganó nada, prefirió quedarse un poco más.
Dan Woo-hyun se rió entre dientes.
“¿Tuviste algún contacto?”
"No recibí ninguno... Hmm, ahora que lo pienso, ¿no he tenido noticias de ellos últimamente?"
Sa Dohak ladeó la cabeza.
La carta que se suponía vendría de Dong Bang-gu no llegó. Era alguien que escribía todo lo que sucedía en el Culto cada cinco días, y parecía haber pasado alrededor de un mes desde que hubo noticias.
Dohak frunció el ceño.
¿Ahora que?
Además, esta pregunta era de Dan Woo-hyun, quien nunca había prestado atención al Culto Demoníaco hasta ahora, lo que provocó que Sa Dohak entrara en pánico.
"¿Por qué? ¿Qué piensas tú que sucederá?"
"No, no es así…"
Dan Woo-hyun desvió la mirada y solo miró a Sa Dohak.
Parecía que había algo escondido detrás de esa expresión.
"Es simplemente extraño".
“Jajaja, no te preocupes. ¿De qué tienes miedo? Es el Culto Demoníaco del que se dice que es la base de cien mil demonios. ¿Qué clase de persona querría meterse con eso?
Sa Dohak de repente se levantó y se rió a carcajadas.
La confianza absoluta en el Culto.
'Ese es el culto demoníaco en el que creo'.
Incluso ahora, cuando las Facciones de la Justicia, que eran los mayores rivales, se dividieron, la única que podría interferir con el Culto Demoníaco es, como mucho, la Secta del Mal sola.
Entonces, ¿cómo se atreven...?
El enemigo, el Castillo del Emperador Murim, no los alcanzaría y no intentaría oponerse al Culto Demoníaco de Xi'an. Aunque ambos estaban entre los Cinco Emperadores, seguramente no podrá derrotar a Sa Dohak a su nivel.
"Bien."
Dan Woo-hyun volvió la cabeza sin mucha reacción.
Sa Dohak resopló y se volvió. Vio a Namgung Chun y Namgung Sohye empuñando espadas y entrenando.
Namgung Chun enseñó todos los días para compensar las deficiencias de Namgung Sohye. La hacía entrenar cuatro veces al día como si estuviera dispuesto a darlo todo.
Por eso, Sa Dohak se aburría de no tener a nadie con quien pasar tiempo con él.
Sa Dohak asomó las orejas y dijo:
"¿Quieres pasar un rato?"
“Sin pensamientos. Si estás tan aburrido, ve a jugar con Somi”.
"Puaj..."
Sa Dohak gimió y miró a Dan Somi. Ella caminaba hacia ellos, bostezando y frotándose los ojos, como si acabara de despertar.
Sa Dohak se levantó como si no tuviera otra opción. En momentos como este, jugar con ella era la mejor opción.
Entonces él se levantó y se acercó a ella.
Dan Woo-hyun observó cómo se desarrollaba esto.
Cualquiera podría convertirse en una buena persona frente a Dan Somi. Incluso Jang Sam-tae y Sa Dohak, que normalmente no eran amables, terminaron siendo amables con Somi.
Dohak sonrió.
Cogió a Dan Somi, de ojos somnolientos, la acunó en sus brazos y comenzó a caminar hacia alguna parte. No sabía lo que intentaban hacer, pero probablemente era sólo un juego para Dan Somi.
Todas estas escenas eran sólo parte de la vida diaria de la mansión y nada debería cambiar.
Dan Woo-hyun pensó en esto y miró a Jang Sam-tae.
Tan pronto como Jang Sam-tae lo vio desde la distancia, se acercó corriendo. Ahora, aunque no dijo mucho, parecía saber que Dan Woo-hyun era como un fantasma.
Dan Woo-hyun se rió entre dientes.
“¿Me llamaste?”
"Bien, lo descubriste".
“Jeje, ahora lo sé con solo mirar los ojos de Manor Lord. Más bien, ¿qué está pasando?
"Tengo algo de trabajo por hacer."
"¡Sí! ¡Solo di la palabra! Arriesgaré mi vida para llevar a cabo esta misión”.
Jang Sam-tae sonrió alegremente.
Si Dan Woo-hyun le diera una tarea, Sa Dohak no interferiría. ¿Y qué podría ser mejor que escapar de las garras de Sa Dohak?
Dan Woo-hyun sonrió, sin importar si conocía los pensamientos de Jang Sam-tae o no.
"Ve al culto demoníaco".
"…¿Oh?"
"¿Lo escuchaste mal?"
No, no lo había hecho.
Jang Sam-tae intentó recordar la conversación.
'¿El culto demoníaco?'
Estaba seguro de que no había oído mal.
Su expresión se puso tensa mientras forzaba una sonrisa incómoda.
“Si es el Culto Demoníaco… ¿entonces el élder Sa Dohak…?”
"Bien."
“¿Tú… te refieres al lugar al que se tarda cuatro meses en llegar en carruaje?”
Se encontró incapaz de formular toda la pregunta.
Viajar de Honam a Xinjiang llevaría mucho tiempo. Incluso con un transporte rápido, serían más de cuatro meses y, al ritmo más rápido, todavía tomaría tres.
En definitiva, sería un camino arduo.
Por supuesto, existía la posibilidad de escapar de las tristes garras del hombre, pero Xinjiang estaba demasiado lejos y contemplar lo que le esperaba allí era aterrador.
Estaban los Ochenta y Cuatro Bosques Verdes en camino a Xinjiang, y con las sectas en guerra, la seguridad no estaba garantizada.
Corría el riesgo de morir.
Jang Sam-tae miró a Dan Woo-hyun.
"¿Vas en serio?"
"¿Suena como si estuviera bromeando?"
“¿Qué tal si le preguntamos al élder Sa Dohak…?”
Dan Woo-hyun sonrió como divertido.
Las luchas de Jang Sam-tae le parecieron bastante interesantes.
Dan Woo-hyun apoyó la barbilla en la mano y murmuró.
“No hay necesidad de llegar a tales extremos. Simplemente te pido que me traigas información detallada sobre el Culto Demoníaco”.
"Estoy cagado de miedo."
Jang Sam-tae suspiró profundamente.
Después de un momento, se enderezó bajo la intensa mirada de Dan Woo-hyun.
Quizás Dan Woo-hyun había leído sus pensamientos.
“Pero en lo que respecta a la información sobre el Culto Demoníaco, ¿no deberíamos considerar…?”
"No será de ninguna ayuda".
"¡Jajaja! ¡Bien! ¡Yo, Jang Sam-tae, soy más útil que el élder Sa! ¡De hecho yo soy!"
Jang Sam-tae se echó a reír.
¿De qué servían las formidables artes marciales?
¡Completamente inutil!
La persona en la que confiaba Dan Woo-hyun no era otra que Jang Sam-tae.
¡Era indispensable!
La idea no lo abandonaba, por lo que se sentía como si estuviera volando, ansioso por ganarse la confianza de alguien como Dan Woo-hyun.
“Manténgase lo más oculto posible. No importa si es sólo un rumor; traer cualquier cosa.”
"¡Entiendo! ¡Empecemos por la Secta del Distrito Inferior y busquemos alrededor!
Dan Woo-hyun asintió y sacó una bolsa de su bolsillo. Recopilar información fue bueno, pero tener dinero facilitó las cosas.
“Lleva a Ma Jang-kang contigo. Si la información no sale, intenta ir a otros lugares. El Bosque Verde y la Secta del Distrito Inferior son buenas opciones…”
"…¿Oh?"
“¿No escuchaste eso?”
“No… lo escuché todo… ¿Estás diciendo que está bien irrumpir en otros lugares para obtener información?”
"Bien. Asumiré la responsabilidad por ello”.
"…¿Es tan importante?"
Jang Sam-tae tragó saliva. Al ver las acciones de Dan Woo-hyun, escuchar su tono de voz y considerar la tarea que tenía por delante, se dio cuenta de que este tema nunca debe tomarse a la ligera. La idea de recopilar todos los rumores, formar equipo con Ma Jang-kang e incluso acercarse al Bosque Verde significaba que esta tarea era de suma importancia.
Quizás por eso, el corazón de Jang Sam-tae se sentía pesado por la preocupación.
Ésta era una misión que no podía permitirse el lujo de fracasar.
“Por eso te envío. No lo olvide. Acércate lo más que puedas a Xinjiang y tráeme información. No, sería bueno entrar al lugar también. Si sucede algo, asegúrese de enviar una carta e infórmenos de inmediato”.
"Yo... lo entiendo."
Jang Sam-tae asintió, sin pensarlo mucho.
Hace apenas un momento, había prometido no acercarse demasiado a Xinjiang, pero al ver la confianza que Dan Woo-hyun depositaba en él, no pudo contenerse más.
Jang Sam-tae miró, lleno de decepción.
Lo que alimentó aún más sus preocupaciones... fue la sonrisa de Dan Woo-hyun.
"Si te encuentras con alguien a quien no puedes manejar, mira hacia atrás y corre aquí".
“Ah, un enemigo que no puedo manejar… ¿es eso lo que estás diciendo?”
"Sí."
“¿Incluso… incluso con Ma Jang-kang?”
"Sí."
Jang Sam-tae asintió mientras pensaba.
'¿Es esta misión más peligrosa de lo que pensaba?'
La advertencia de Dan Woo-hyun fue desconcertante.
Aunque parecía poco probable, Jang Sam-tae juró que si se encontraba en una situación verdaderamente peligrosa, abandonaría a Ma Jang-kang y huiría.
'Porque eso es mejor que morir...'
Jang Sam-tae asintió comprendiendo.
"¡Entiendo! Yo, Jang Sam-tae, recopilaré la información que deseas lo más rápido posible”.
"Bien. Ahora me siento tranquilo”.
Y Woo-hyun sonrió.
No había nadie más adecuado para esta tarea que Jang Sam-tae. Sabía bien lo que hacía, no salía mucho y, como estaba acostumbrado a vivir en el fondo, sabía cómo recopilar información.
'Será difícil perder al chef pero...'
Lo más desafiante de este trabajo fue que no quedaba nadie aquí para administrar las comidas de la mansión, pero había alguien que podía hacerse cargo.
La mirada de Dan Woo-hyun se volvió hacia el campo de entrenamiento.
Aunque no podía verlos, escuchó los vítores a Namgung Sohye.
"Lo hiciste bien".
Él asintió, pensando que era la mejor opción, pero se sentía un poco incómodo.
Una mujer que no sostenía nada más que la espada...
¿Realmente podría preparar algo comestible?
Dijo Dan Woo-hyun.
Dan Woo-hyun lay on the balcony and gazed around at the scenery of the manor.The sight of Dan Somi running around in the yard, the sound of cheers from the side. Jang Sam-tae and Ma Jang-kang bickering, those two old men drinking.
The scene of this manor.
A picture he had never imagined until now.
Dan Woo-hyun closed his eyes and smiled.
However, his smile disappeared before he realized it.
‘The Blood Demon…’
This guy was known to be a bloodthirsty one.
That force, that energy, and that tone of voice too. He was someone who could never be forgotten. Now that things had started to move, Dan Woo-hyun couldn’t sit still.
So, first, he tried to get his hands on the Golden Ring Merchant Union.
No matter what the fight, fighting costs money. Also, there must be a person called Man Hu-ryang somewhere with the Blood Demon, so the person most needed was the one to take down his merchant union.
And things began to move.
Now.
Time, which had been moving slowly until then, was rapidly accelerating.
Dan Woo-hyun was the only one who felt that.
‘Where is it?’ he thought to himself and followed the place. The fastest way to end this was to destroy the base.
Killing the Blood Demon would be the best.
But unlike the past, when the Blood Demon Cult was exposed to the public, it was now hidden away and operated quietly, so even if one wanted to look for it, one couldn’t find it.
That was why they were trying to catch Man Hu-ryang first.
He, too, was already missing.
But, it was natural for his funds to flow to the Blood Demon. And if one was looking for something else, then there was another thing they found.
‘The Black Wind Godly Demon.’
They needed to catch him too.
It was said that the person who once fought with Chun Mujin for three days and nights had finally managed to kill the Black Wind Godly Demon. Since this was the guy who originally founded the Demonic Cult, the place he would go to was…
“What are you so concerned about?”
Dan Woo-hyun answered without looking.
“There’s nothing to worry about. There are just a couple of things that bother me, that’s all. Why not head back to the Demonic Cult?”
Dan Woo-hyun said and looked at Sa Dohak.
Next thing he knew, Sa Dohak sat down next to him and shrugged. He wanted to go back, but since he gained nothing there, he preferred to stay a bit longer.
Dan Woo-hyun chuckled.
“Did you get any contact?”
“I didn’t get any… Hmm, come to think of it, I haven’t heard from them lately?”
Sa Dohak tilted his head.
The letter that was supposed to come from Dong Bang-gu didn’t arrive. He was someone who would write down everything that happened in the Cult every five days, and it seemed to have been around a month or so since there was any news.
Sa Dohak frowned.
What now?
Moreover, this question was from Dan Woo-hyun, who had never paid attention to the Demonic Cult until now, which caused Sa Dohak to panic.
“Why? What do you think will happen?”
“No, it’s not like that…”
Dan Woo-hyun turned his gaze away and just glanced at Sa Dohak.
It seemed like there was something hidden behind that expression.
“It’s just weird.”
“Hahaha, don’t worry. What are you scared of? It’s the Demonic Cult which is said to be the base of one hundred thousand demons. What kind of person would want to mess with that?”
Sa Dohak suddenly stood up and laughed out loud.
The absolute trust and confidence in the Cult.
‘That’s the Demonic Cult I believe in.’
Even now, as the Justice Factions, who were the biggest rivals, got divided, the only one that could interfere with the Demonic Cult is, at most, the Evil Sect alone.
Then how dare they…
The enemy, the Murim Emperor Castle, would not reach them, and he would not try to oppose the Xi’an Demonic Cult. Although they were both among the Five Emperors, surely he cannot defeat Sa Dohak at his level.
“Right.”
Dan Woo-hyun turned his head without much reaction.
Sa Dohak snorted and turned. He saw Namgung Chun and Namgung Sohye wielding swords and training.
Namgung Chun taught every day to compensate for Namgung Sohye’s shortcomings. He had her train four times a day as if he were willing to give her his all.
Because of that, Sa Dohak felt bored with no one to spend time with him.
Sa Dohak poked his ears and said,
“You want to hang out for a while?”
“No thoughts. If you are so bored, go and play with Somi.”
“Ughh…”
Sa Dohak groaned and looked at Dan Somi. She was walking their way, yawning and rubbing her eyes, looking like she had just woken up.
Sa Dohak got up as if he had no other choice. In times like this, playing with her was the best option.
So he stood up and approached her.
Dan Woo-hyun watched this unfold.
Anyone could become a good person in front of Dan Somi. Even Jang Sam-tae and Sa Dohak, who were not usually kind, ended up being nice to Somi.
Sa Dohak smiled.
He picked up the sleepy-eyed Dan Somi, cradled her in his arms, and began to walk somewhere. He didn’t know what they were trying to do, but it was probably just a game for Dan Somi.
All these scenes were just part of the manor’s daily life and nothing should change.
Dan Woo-hyun thought about this and looked at Jang Sam-tae.
As soon as Jang Sam-tae caught sight of him from a distance, he came rushing over. Now, even though he didn’t say much, he seemed to know that Dan Woo-hyun was like a ghost.
Dan Woo-hyun chuckled.
“You called for me?”
“Right, you figured it out.”
“Hehe, now I know just by looking at Manor Lord’s eyes. Rather, what’s happening?”
“I have some work to do.”
“Yes! Just say the word! I will risk my life to carry out this mission.”
Jang Sam-tae smiled brightly.
If Dan Woo-hyun gave him a task, Sa Dohak would not interfere. And what could be better than escaping Sa Dohak’s clutches?
Dan Woo-hyun smiled, regardless of whether he knew Jang Sam-tae’s thoughts or not.
“Go to the Demonic Cult.”
“…Uh?”
“Did you hear it wrong?”
No, he hadn’t.
Jang Sam-tae tried to recall the conversation.
‘The Demonic Cult?’
He was certain he hadn’t misheard.
His expression grew tense as he forced an awkward smile.
“If it is the Demonic Cult… then Elder Sa Dohak’s…?”
“Right.”
“You… you mean the place that takes a four-month carriage ride to reach?”
He found himself unable to ask the whole question.
Traveling from Honam to Xinjiang would take a long time. Even with a fast carriage, it would be over four months, and at the fastest pace, it would still take three.
In short, it would be an arduous journey.
Of course, there was the chance to escape from the sad clutches of the man, but Xinjiang was too far, and contemplating what awaited there was terrifying.
There were the Eighty-four Green Forests en route to Xinjiang, and with the sects at war, safety was not guaranteed.
He was facing the risk of death.
Jang Sam-tae looked at Dan Woo-hyun.
“You’re serious?”
“Do I sound like I’m joking?”
“What about asking Elder Sa Dohak…?”
Dan Woo-hyun smiled as if amused.
Jang Sam-tae’s struggles seemed quite interesting to him.
Dan Woo-hyun rested his chin in his hand and mumbled.
“There’s no need for such extremes. I’m simply asking you to bring me detailed information about the Demonic Cult.”
‘I’m scared shitless.’
Jang Sam-tae sighed deeply.
After a moment, he straightened up under Dan Woo-hyun’s intense gaze.
Perhaps Dan Woo-hyun had read his thoughts.
“But as far as information on the Demonic Cult is concerned, shouldn’t we consider…?”
“It won’t be of any help.”
“Hahaha! Right! I, Jang Sam-tae, am more useful than Elder Sa! Indeed, I am!”
Jang Sam-tae burst into laughter.
What good was formidable martial arts?
Completely useless!
The person Dan Woo-hyun trusted was none other than Jang Sam-tae.
He was indispensable!
The thought wouldn’t leave him, so he felt as if he were flying, eager to earn the trust of someone like Dan Woo-hyun.
“Stay as hidden as possible. It doesn’t matter if it’s just a rumor; bring back anything.”
“I understand! Let’s start from the Lower District Sect and search around!”
Dan Woo-hyun nodded and removed a pouch from his pocket. Collecting information was good, but having money made things easier.
“Take Ma Jang-kang with you. If the information doesn’t come out, try going to other places. The Green Forest and the Lower District Sect are good options…”
“…Uh?”
“Didn’t you hear that?”
“No… I heard it all… Are you saying it’s alright to barge into other places to get information?”
“Right. I’ll take responsibility for it.”
“…Is it that big of a deal?”
Jang Sam-tae gulped. Seeing Dan Woo-hyun’s actions, hearing his tone of voice, and considering the task now before him, he realized that this issue should never be taken lightly. The idea of gathering all the rumors, teaming up with Ma Jang-kang, and even approaching the Green Forest meant that this task was of the utmost importance.
Perhaps because of that, Jang Sam-tae’s heart felt heavy with worry.
This was a mission he could not afford to fail.
“This is why I’m sending you. Do not forget. Get as close as you can to Xinjiang and bring me information. No, it would be good to enter the place too. If anything happens, make sure to send a letter and let us know right away.”
“I… I understand.”
Jang Sam-tae nodded, not giving it much thought.
Just a little while ago, he had promised not to get too close to Xinjiang, but seeing the trust Dan Woo-hyun placed in him, he couldn’t hold back any longer.
Jang Sam-tae looked on, filled with disappointment.
What further fueled his worries… was Dan Woo-hyun’s smile.
“If you happen to meet someone you cannot handle, look back and run here.”
“Ah, an enemy I cannot handle… is that what you’re saying?”
“Yes.”
“Even… even with Ma Jang-kang?”
“Yes.”
Jang Sam-tae nodded as he thought.
‘Is this mission more dangerous than I thought?’
The warning from Dan Woo-hyun was unnerving.
Although it seemed unlikely, Jang Sam-tae vowed that if he found himself in a truly dangerous situation, he would abandon Ma Jang-kang and flee.
‘Because that is better than dying…’
Jang Sam-tae nodded in understanding.
“I understand! I, Jang Sam-tae, will gather the information you want as quickly as possible.”
“Good. I feel reassured now.”
Dan Woo-hyun smiled.
There was no one more suitable for this task than Jang Sam-tae. He knew his stuff well, didn’t go out much, and having been used to living at the bottom, he knew how to gather information.
‘It will be difficult to lose the chef but…’
The most challenging thing about this work was that there was no one left here to manage the meals of the manor, but there was one who could take over.
Dan Woo-hyun’s gaze turned to the training ground.
Although he couldn’t see them, he heard the cheering for Namgung Sohye.
“You did that well.”
He nodded, thinking it was the best choice, but he felt a bit uneasy.
A woman who held nothing but the sword…
Could she really prepare something edible?
Dan Woo-hyun sighed.
